DWI informa de una importante caída de las ventas debido a la inflación y a la guerra de Ucrania.
Los alemanes se mostraron muy moderados en sus compras de vino en el primer trimestre de 2022. Según las últimas cifras del Instituto Alemán del Vino (DWI), las cantidades de vino compradas de enero a marzo de 2022 fueron un siete por ciento inferiores al periodo comparable de 2020, es decir, antes del comienzo de la pandemia de Covid. En comparación con el primer trimestre del excepcional año 2021, con su fortísimo crecimiento de las ventas debido al cierre en ese momento, la DWI registra ahora un descenso del 18%.
El gasto en vino se mantuvo constante en el primer trimestre de 2022 en comparación con los tres primeros meses de 2020. En comparación con el mismo periodo del año anterior, el valor de los vinos comprados también disminuyó significativamente en un 16%. La directora general de DWI, Monika Reule, justifica el descenso con el ahorro de los consumidores debido al aumento del coste de la vida provocado por la inflación, así como por las consecuencias de la guerra de Ucrania. «Mientras la tensa situación económica no mejore, es de temer que esta evolución continúe», predice Reule.
El porcentaje de hogares que compraron vinos de origen alemán volvió a situarse en el nivel anterior a la pandemia en los tres primeros meses de 2022. Los vinos importados, en cambio, atrajeron a un número ligeramente inferior de compradores. Para los consumidores de vino, el sabor y la experiencia que han tenido con un vino son los factores más importantes a la hora de comprarlo. El comportamiento de compra también está muy influenciado por el precio y el país o la región de la que procede el vino.
FUENTE: REVISTA.WEIN.PLUS