El amplio territorio que compone el secano mendocino, es decir la superficie que depende únicamente del agua de lluvia para todas sus actividades, contiene una estructura vial que se extiende desde el sur de Lavalle hasta San Martín y continúa a través de Junín, Rivadavia, Santa Rosa y La Paz, para luego conectar con San Rafael y General Alvear.

“La falta de lluvias ha generado un desgaste notable en rutas y caminos de la zona rural y ganadera. Son ejes que dependen del agua para poder ser estabilizados y consolidados, en los cuales solo se puede transitar con vehículos 4 xr 4”, indicaron desde el organismo vial.

De norte a sur, los caminos rurales más afectados

Dentro de las rutas más afectadas se encuentran:

  • La Ruta Provincial 51, en Desaguadero, La Paz.
  • La Ruta Provincial 153, desde la Ruta Nacional 7 al Norte.
  • Las calles Valli y Talavera (Circuito Lavalle-Norte de San Martín).
  • Los caminos rurales ubicados en Colonia San Jorge, Santa Rosa.
  • La calle Cruz del Yugo en La Paz.
  • La Ruta Provincial 77, en La Paz.
  • Los caminos ubicados al Norte de Las Catitas, en Santa Rosa.
  • En el oasis Sur, están comprendidas las rutas provinciales 152, 203, 205, 206 y 190.

Consolidar las rutas de suelo natural en los sectores del secano es una de las tareas más arduas por parte de Vialidad Provincial.

Es una labor que requiere modificar la estructura de la traza incorporando una mezcla de material árido y arcilla para elevar y solidificar la superficie de rodamiento, la cual es posteriormente regada y “sellada” por los equipos viales que completan la obra generando los declives necesarios para posibilitar el drenaje correspondiente.

“Las zonas Norte, Este y Sur de Mendoza son las más afectadas por los efectos de la sequía”, subrayaron desde el ente vial.