La referente del Frente Renovador acusó que se trata de «una industria que para seguir mostrando sus cualidades debe sustentarse en productores y trabajadores pobres e indigentes».

Gabriela Lizana propone algo revolucionario: redistribuir la “renta-viabilidad” en la industria vitivinícola mendocina. Lo planteó a través de un hilo de Twitter en las últimas horas.

“Estuve atenta a los costos de Producción de uvas para vinificar elaborados por el Inta. He leído lo que ofrecen los compradores. La distancia es tal, qué hay que entender que lo que se juega aquí es la viabilidad de la Industria vitivinícola“, arrancó la referente del Frente Renovador local.

Y añadió: “Años de falta de plan estratégico y falta de política pública vitivinícola, llevaron hasta aquí a un sector con muchísima complejidad. Reitero algo que propuse hace años: es necesario estudiar la cadena y evaluar la distribución de la renta. Entiendo además que cada eslabón tiene sus problemas que deben ser atendidos: promover la exportación, cuidar el mercado interno, stocks de algunas variedades que no hay, presión por la importación , dificultades para importar algunos insumos“.

Para Lizana, “hemos llegado a un punto en el que para que la industria continúe en producción, los compradores plantean que sólo pueden pagar un precio que según los costos oficiales ( Inta ) estarían por debajo de lao costos de producción. Es decir, es el productor el que debe subsidiar la Cadena para que esta siga funcionando. Algo ya imposible de sostener”.

Al mismo respecto, la mujer pidió “que sus trabajadores (contratistas) tengan paritarias por debajo de la inflación. Es decir, una industria entonces que para seguir mostrando sus cualidades debe sustentarse en productores y trabajadores pobres e indigentes. Esto no va más“.

En otro orden de cosas, Lizana sostuvo que “el mundo exige certificaciones de triple impacto : cuidar el medio ambiente, que las actividades sean rentables para todos los eslabones y que tengan impacto social positivo. ninguna industria puede sustentarse en la generación de pobreza. Y ya esto no es algo que puede solucionarse con ayudas de los gobiernos .Subsidios o Creditos. Eso si es ayuda para las contingencias”.

A su vez, explicó: “Pero hay que entender que una Cadena de valor tiene la fuerza de su eslabón más débil. Y ésta entonces se ha roto por la debilidad de los trabajadores y productores. Si no se llega a precios Justos, si no logramos rentabilidad para todos los eslabones, si no actuamos con un diagnóstico certero y con una propuesta estratégica a corto mediano y largo plazo, seguirán perdiéndose viñedos”.

Y culminó: “Es tarea de la industria hacer promover esto. Y es responsabilidad de los Gobiernos entender y facilitar las condiciones para que esto pueda darse las próximas mesas vitivinicolas que se realicen con toda la cadena y los gobiernos, tendrán la inmensa tarea de definir el porvenir de la vitivinícultura Argentina”.