Luego de una larga investigación llevada adelante por la Comisión de Comercio Internacional de los Estados Unidos (ITC) contra una presunta maniobra de dumping de la miel argentina, el gigante de Norteamérica inició una nueva pesquisa, esta vez contra el mosto de uva cuyano.
Si bien las primeras averiguaciones comenzaron en abril de este año, mes en que la Cancillería argentina recibió una denuncia presentada por la empresa californiana “Delano Growers Grape Products” de la mano de la ITC, fue en las últimas semanas que la noticia cobró gran vigor tras la aplicación de nuevos aranceles a la exportación de mosto a ese país.
El reclamo presentado desde California tiene dos vetas. Por un lado se acusó al Estado argentino de aplicar subsidios a la producción, que habrían servido para abaratar los costos y el precio final. Para la empresa estadounidense, esta maniobra generó condiciones comerciales desleales en beneficio de Argentina.
La segunda denuncia apunta contra los privados, quienes habrían comercializado mosto por debajo de los costos de producción y por consiguiente realizando dumping.
“En julio se abrió el proceso de investigación formal y ahora en octubre, finalmente, hubo una definición preliminar que tiene que ver con la parte de los subsidios. Los subsidios están relacionados con las políticas que aplican los estados y por eso accionó cancillería. En la industria nosotros tenemos un reintegro del 7% del valor FOB a los exportadores, cuya finalidad es no exportar impuestos internos. No implica un beneficio en sí mismo sino un reconocimiento de una carga fiscal que no tiene por qué ser exportada”, explicó a Bichos de Campo Rodolfo Paolucci, gerente de la Cámara Argentina de Fabricantes y Empresas de Mosto (CAFEM).
Sin embargo, en esta decisión preliminar las autoridades norteamericanas decidieron aplicar de todos modos un arancel extra a los envíos del 5.5% para las empresas exportadoras.
Al igual que ocurrió con el caso de la miel, dicho arancel surge de un promedio entre el valor más bajo aplicado a una de las empresas locales investigadas (Cepas Argentinas recibió un 3.71%) y el más alto (Fecovita recibió un 7.16%). El 5.5% en cuestión será aplicado a por lo menos quince empresas del sector, entre las que se encuentran ENAV, Montpellier y Exportadora Vitivinícola S.A.
“Investigaron a esas dos empresas por ser las más representativas del mercado mostero en Argentina. En esta instancia, ese arancel se sumará al monto fijo en dólares que ya teníamos, que depende del valor FOB. Calculá que ronda entre el 8% y el 10%. Pero hay que remarcar que es preliminar. No sabemos si el arancel quedará en ese nivel. Si bien el exportador tendrá que pagarlo, en realidad no hay una ejecución definitiva sino que pasa a engrosar un fondo. En el caso de no seguir la misma suerte, los montos serían reembolsables”, indicó Paolucci.
El sector de mosto de uva en el país toma aproximadamente el 30% de toda la uva producida a nivel local. Se concentra principalmente en Mendoza y San Juan, siendo la primera la que mayor participación en el mercado tiene. Dado que el consumo interno es muy pequeño, históricamente se exporta entre el 80% y el 90% de la producción total de mosto, cuya principal aplicación es industrial, como endulzante de jaleas y bebidas.
La producción promedio siempre ha rondando las 130.000 toneladas y representa un flujo de divisas que se ubica entre los 130 y 150 millones de dólares anuales. De ese total, Estados Unidos se ubica como el principal comprador llevándose entre 40 y 45 mil toneladas por año. En 2021 Argentina facturó por ese intercambio alrededor de 50 millones de dólares.
“La principal consecuencia negativa de esta medida es que quien la quiere aplicar es nuestro principal destino para la venta. La producción de mosto tiene un rol muy importante dentro de la vitivinicultura porque genera valor agregado y divisas a partir de uvas que no son de alto valor enológico, además de numerosos puestos de trabajo. Junto a España estamos entre los primeros exportadores del mundo, teniendo unas 20 a 25 empresas nacionales que apuntalan esta actividad”, señaló Paolucci.
Además de Estados Unidos, otros destinos para el mosto de uva son Canadá, Sudáfrica, Arabia Saudita y Chile. El mismo se envía mayoritariamente en tambores.
Según indicó Paolucci a Bichos de Campo, para finales de octubre se espera una nueva determinación preliminar, esta vez sobre la sospecha de dumping específicamente. Sin embargo, recién en 2023 llegaría la decisión final de la Comisión de Comercio Internacional de ese país.
FUENTE: BICHOSDECAMPO.COM