Carlos Fiochetta, gerente general de COVIAR, aseguró en diálogo con Ámbito que “para ampliar exportaciones se esta trabajando con los organismos de promoción del sector privado y público. Actualmente hay más de 15 bodegas que exportaron a China y en el último tramo del año pasado se realizaron acciones en las ciudades de Beijing, Shanghái y Shenzhen donde el vino fue protagonista”.

El propio embajador Sabino Vaca Narvaja se mantiene al frente de la iniciativa y trabaja con un equipo multisectorial que buscará que Alberto Fernández presente la estrategia “Malbec Cero Arancel” en el marco de una visita que el mandatario realizaría a China a principios del próximo año.

Fiochetta destacó que para crecer en exportaciones “se está trabajando en mejoras desde el punto de vista tributario. Creemos que es central para nuestro sector quitar las retenciones porque generamos valor agregado, tenemos distribución territorial y empleamos mucha mano de obra”.

Según el empresario vitivinícola, “existen varios mercados identificados pero por diferentes razones no terminan de desarrollarse. China representa el 3% de la venta de vinos fraccionados argentinos y el potencial para crecer es grande, pero debemos resolver cuestiones tales como los aranceles de ingreso”.

Los números de China que deslumbran a todos

El mercado del vino en China tiene una potencialidad ilimitada y aunque en los últimos años -pandemia mediante- cayó en cuanto al consumo, cuando se recupere la economía no hay dudas de que volverá a ser un mercado atractivo.

El último censo muestra que el país tiene más de 900 millones de residentes urbanos con altos ingresos; se estima que hay 52 millones de bebedores de vino y se espera que el tamaño del mercado del vino se expanda a u$s18 mil millones para 2023.