El Gobierno nacional, encabezado por Javier Milei, habilitó medidas para alentar la importación de alimentos para que, de acuerdo al oficialismo, los productos de afuera compitan con los nacionales y le pongan un freno a la subida de precios. Sin embargo, desde del sector vinculado a la industria vitivinícola de San Juan están sumamente preocupados debido a que esas políticas provocará una mayor baja en el precio de la uva, lo que pone en peligro la subsistencia de los agricultores.

Aunque aclaró que los productos vitivinícolas argentinos están preparados para competir con los importados, tanto en cuanto a su calidad como a su precio, pero están intranquilizados por maniobras desleales que existen en el mercado. “Hay empresas que no le interesa la situación del productor y mucho menos todo lo que hace a la responsabilidad social empresaria. Entonces, aunque le salga más caro, compran afuera para desalentar precios y expectativas”, remarcó. Para el dirigente una forma de controlar estas situaciones es mediante la puesta en marcha de la autoridad en defensa de la competencia, que debe dedicarse a garantizar el desenvolvimiento de un mercado justo.

“Argentina es competitiva, tenemos muy buena productividad y estamos en un momento donde las variables macroeconómicas se están reorganizando o reajustando, pero entiendo yo que esto debería dejarnos bien posicionados”, declaró el productor. Por eso, han pedido una reunión con autoridades del Gobierno de la provincia para dar a conocer las problemáticas y desafíos que enfrenta el ámbito frente a este nuevo panorama.

Por otra parte, Juan José Ramos, presidente interino de la Asociación de Viñateros Independientes, se mostró con mayor preocupación y advirtió que la importación de vino fomentará la fuga de dólares. “Nosotros tenemos que promover las exportaciones, no la importación de bienes que producimos en el país”, dijo el viñatero.

Remarcó que actualmente el precio de uva se encuentra en un valor bajo y la habilitación para traer vino del extranjero profundizará la caída de la materia prima de la industria madre sanjuanina. “El año pasado habíamos logrado las licencias no automáticas que frenaba la importación. Ahora se puede importar sin la necesidad de solicitar permiso”, declaró.

“Esto pone en peligro a los productores por lo que muchos podrán desaparecer” y citó al documento de la Confederación Federal PYME Argentina, el cual expresó que: “Pone en riesgo la soberanía alimentaria de un país con capacidad para alimentar a más de 500 millones de personas es incomprensible e indiscutible. Destruir este entramado productivo pondrá a la Argentina en una posición de dependencia de las importaciones de alimentos, con el consiguiente riesgo de interrupciones en el suministro debido a factores como la volatilidad de los precios internacionales, los conflictos comerciales o las crisis geopolíticas”.

DIARIO HUARPE