Todos los años las dos provincias vitivinícolas mas importantes del país, se reúnen para acordar el porcentaje de diversificación, es decir, que cantidad de la producción de uva será destinada a elaborar vinos y cuanta a la elaboración de mostos. Este año, por diversas razones, este acuerdo no se produjo al iniciar la cosecha, como lo es habitualmente; es más, aún no existe ese acuerdo cuando prácticamente la cosecha esta por acabar. En la siguiente nota del diario vitivinícola enolife.com.ar/es/ se analiza este nuevo round entre Mendoza y San Juan para llegar finalmente a un acuerdo para este 2021.
A poco de finalizar la cosecha de uva en Argentina, aún no se ha firmado el tradicional acuerdo Mendoza-San Juan que establece la pauta de diversificación vitivinícola, es decir cuánta uva del total cosechado se destina a elaborar vino y cuánta a consumo en fresco, pasas o mosto sulfitado. Hace un mes, entidades del sector elevaron sus propuestas al Gobierno de Mendoza. Por un lado, la Mesa Vitivinícola Nacional pedía que el porcentaje de mosto no superara el 10%. Por su lado, la Asociación de Viñateros de Mendoza (AVM) solicitaba que no bajara del 22%. Hoy, sus requerimientos se acercan más a lo que se fijaría por norma.
Según el Decreto 387/18 ratificado por Ley 9061, si el acuerdo Mendoza-San Juan no se firma por algún motivo, el porcentaje de uva destinada a diversificación, por defecto, debe ser del 20%. Pero este año el gobierno de Mendoza, argumentando que ya es tarde por lo avanzado de la cosecha y que la producción será baja, pidió a San Juan poner el foco más en la prevención de las importaciones de vino, que podrían afectar el comportamiento de los precios internos.
El Gobierno de Mendoza envió recientemente al Gobierno de San Juan una propuesta de texto para definir el acuerdo de diversificación de uva para 2021. Según manifestó a Enolife una fuente del Ministerio de Economía de Mendoza, «como este año es atípico porque la producción de vino está por debajo del promedio histórico, le pedimos a San Juan que el foco gire hacia la problemática que genera la importación de vinos hacia nuestro país».
Y detalló nuestro informante: «Como los precios se han tonificado, hay un escenario posible de importación, con lo cual lo que este año buscamos con el acuerdo es trabajar en conjunto para que el gobierno de la Nación articule medidas que no favorezcan la importación, y que no se caiga el precio de mercado».
Otro punto que pide Mendoza para establecer en el acuerdo es la armonización de medidas, para que sean las mismas para Mendoza que para San Juan. Y explicó la fuente: «Nosotros hicimos una campaña en el 2017 y 2018 en Mendoza subiéndole Ingresos Brutos a la importación de vinos, pero San Juan no tomó la misma medida, con lo cual las importaciones entraban por ahí».
A continuación replicamos una parte de la propuesta mendocina para el «Acta de Acuerdo 2021, Interprovincial Mendoza / San Juan», sobre los puntos antes expuestos:
«Entre el Gobernador de la provincia de San Juan, representado por el Sr. Gobernador Sergio Mauricio Uñac y el gobernador de la provincia de Mendoza, representado por el Sr. Gobernador Rodolfo Suarez, en ejercicio de las facultades acordadas por el Acuerdo Interprovincial Mendoza-San Juan, expresan:
«Que, si bien es cierto que las provincias signatarias ratifican su interés y compromiso por mantener la política de diversificación regional, las circunstancias actuales de la industria exigen poner mayor atención en prevenir que se inicie, como ocurrió en el pasado, un proceso importador de vinos que ponga en riesgo no sólo los efectos de la política de diversificación, sino también que afecte el comportamiento favorable de los precios que están percibiendo los productores y elaboradores por sus uvas, vinos y mostos, respectivamente; que es en definitiva el objetivo principal del Acuerdo Interprovincial.
«Que el estímulo a la diversificación vitivinícola con miras a promover las exportaciones de productos vitivinícolas, ya sea que se trate de vinos como de jugo concentrado de uva, requiere actualizar la contribución obligatoria, ya que la evolución del nivel general de precios durante los últimos 6 años en la Argentina, como así también el comportamiento de los precios de los productos vitivinícolas en el mercado de traslado, han dejado obsoleta esta señal económica.
«Que la citada señal económica de diversificación para el sector vitivinícola supone la imposición de una contribución obligatoria que grava la uva ingresada a bodega y vinificada, quedando eximidos de la misma quienes elaboren producción diversificada, en la proporción que fijen anualmente los Poderes Ejecutivos.
«Por lo expuesto: Los poderes ejecutivos de la Provincia de San juan y de Mendoza acuerdan:
«Primero: Solicitar al Gobierno Nacional que tome las medidas necesarias para evitar las importaciones de vino en la República Argentina, ya sea que se trate de graneles o fraccionados, siempre y cuando haya producción nacional suficiente para proveer a los mercados interno y externo.
«Segundo: Armonizar las políticas provinciales dirigidas a mitigar las importaciones de vino dirigidas a los establecimientos vitivinícolas fraccionadores radicados en el territorio de ambas provincias signatarias».
Los puntos 3 y 4 refieren como los años anteriores a la diversificación vitícola.
Qué piden los productores asociados
Respecto de las solicitudes del sector, desde la Mesa Vitivinícola Nacional (Bodegas de Argentina, Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, Cámara de Bodegueros de San Juan, entre otros integrantes) esperan, hoy, que el porcentaje de diversificación en el acuerdo se firme por debajo del 20%. A sabiendas que a esta altura del año ya está la producción en marcha, una fuente de la entidad manifestó a Enolife: «La idea del porcentaje bajo tenía un espíritu en el momento que se solicitó, y ahora con más razón porque acabada la cosecha la gente no ha podido programar cuánto va a diversificar para seguir con la legislación vigente. Por eso hay enojo en el sector, porque no puede ser que estemos a mediados del mes de abril y el gobierno aún no haya firmado el acuerdo».
Por su parte, Eduardo Córdoba, titular de la Asociación de Viñateros de Mendoza (AVM), dijo sentirse conforme con las medidas del Estado provincial, «porque desde el inicio trató de llegar a un acuerdo con San Juan, pero son ellos los que se han ido corriendo». Y consideró Córdoba: «Estamos ya en la semana veinte de cosecha y la información que tenemos es que en Mendoza el porcentaje para mosto ronda el 15%, y haciendo un promedio con la producción de San Juan, estaríamos en un 23%. A esta altura, ya rige el 20% que se aplicaría por defecto, y no vamos a estar muy lejos de ese porcentaje, porque las bodegas para cubrirse y evitar multas, de motus propio ya rondan el 15%, y San Juan siempre produce mucho más». Finalmente, Córdoba redondeó: «Nosotros seguimos hasta última instancia en nuestra posición acerca de que era importante tener un 20 o 22%, porque si no se hace mosto se hace blanco escurrido, que generalmente es la moneda de cambio del productor y arrastra el precio de otros vinos… Y si hay excedente, el blanco escurrido no tiene mercado, como sí lo tiene el mosto en el exterior».
FUENTE: ENOLIFE.COM.AR