Referentes de la Secretaría de Desarrollo Productivo de la Nación se reunieron con productoras del Este de Mendoza para escuchar y plantear los principales problemas a los que se enfrentan.

Por Uvas Argentinas – En un contexto en el que la agenda de las políticas públicas están trazadas por la perspectiva de género, llevar a cabo acciones que prioricen el acceso de las mujeres a sus derechos tiene que ser una estrategia trascendental a todas las disciplinas y la producción no puede ser una excepción.

En este sentido vienen trabajando distintos actores gubernamentales de índole nacional, provincial y hasta municipal. Recientemente, funcionarias del Ministerio de Economía de la Nación, en el marco de sus recorridas por el país, llegaron al Este de la provincia de Mendoza para participar de un panel de Políticas de Género y Desarrollo Productivo.

En concreto, el encuentro en Rivadavia fue encabezado por Gabriela Lizana, integrante de la Secretaría de Desarrollo Productivo y la directora Bice Fideicomisos. Por su parte, se sumó Paula Basaldúa, quien es coordinadora del área de Género de esa secretaría.

El objetivo fue exponer las distintas problemáticas de género que afectan a la mujer productora e intentar poner sobre la mesa las acciones concretas que se pueden ir trabajando para achicar esa brecha.

A la charla asistieron mujeres productoras del departamento y de otras zonas del Este mendocino para escuchar las problemáticas y plantear sus necesidades. Uno de los planteos tiene que ver con la falta de recursos de las mujeres a la hora de huir de situaciones de violencia de género. Esto a nivel productivo se relaciona estrechamente con la informalidad laboral a las que están sometidas en este sector.

Luego, otro de los problemas que se advierte fue respaldado en datos y asegura que la provincia de Mendoza nuclea al 70% de los contratistas de Cuyo. Sin embargo, la ley establece la jubilación sólo para los contratistas de viña, lo que desestima el trabajo de acompañamiento que históricamente han realizado las mujeres en su hogar.

“No queremos que más mujeres se queden marginadas en relación al trabajo, la educación o la participación social. Aunque no soy una experta en género soy una observadora, una madre y mujer, he llegado a hasta donde estoy por la ayuda de otras mujeres”, expresó Lizana. Habrá más encuentros con productoras.

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