Entre los puntos principales que se analizaron y empezaron a consensuar está el de aplicar el beneficio a todos los derivados de la uva, además que la ventana en la que el tipo de cambio diferencial estará vigente será de 120 días. Lo que aún resta establecer es cuánto será ese valor diferencial con el que van a liquidar las exportaciones.

En el cónclave que se llevó a cabo en la Secretaría de Agricultura de la Nación participaron representantes de Coviar, Bodegas de Argentina y también fue parte el presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Martín Hinojosa.

“La reunión estaba convocada por pedido del ministro Sergio Massa para la puesta en marcha del dólar diferencial. Las entidades se mostraron muy conformes con el planteo porque estamos cumpliendo lo anunciado en Vendimia. La semana que viene vamos a continuar”, afirmó Martín Hinojosa.

La idea es que esta vez no suceda lo mismo que en noviembre de 2022 cuando el Ministro de Economía de la Nación llegó a la provincia luego de las heladas tardías y dijo que implementaría un “dólar agro”, pero todo quedó sólo en buenas intenciones.

En esta oportunidad abordaron temas eminentemente técnicos en busca de darle forma a la propuesta final que esperan tener lista antes de fin de mes. Si bien no está el valor que tendrá el nuevo tipo de cambio, en el encuentro empezaron a poner blanco sobre negro a cuestiones específicas que inciden directamente en la aplicación.

“Aún no se sabe el monto del dólar, sí se habló del plazo que estamos previendo. En principio iba a ser menos pero estamos tratando que la ventana sea por 120 días a partir de abril”, sostuvo Hinojosa.

Entre los temas que debatieron “se habló sobre cómo aplicarlo, si se toman las fechas de embarque, operaciones concretadas o fecha de liquidación, si son las actuales o antiguas. No es un detalle menor, es muy importante definir cuál es el momento. En eso trabajamos mucho”.

“Además se charló sobre cuanto se exporta anualmente, cuantas bodegas exportadoras existen, que son 400 en Argentina, las divisas que generan las exportaciones que son casi 1.000 millones de dólares al año y como es la dinámica de la vitivinicultura que es muy distinta a otras economías como puede ser la soja”, afirmó el presidente del INV.

Desde el lado de las entidades que asistieron, la reunión fue considerada positiva y como corolario destacaron que hubo tres cuestiones que para ellos quedaron firmes: que en abril la medida entrará en vigencia; el dólar diferencial alcanzaría a todos los derivados de la uva que son exportables; comenzará la aplicación por la vitivinicultura y luego lo extenderán al resto de las economías regionales.

Para las entidades, el planteo de incluir dentro del beneficio a la totalidad de los productos elaborados a base de uva está puntualmente anclado en la necesidad de repuntar las ventas al exterior.

En febrero la caída en las exportaciones rondó el 27%, en comparación al mismo mes del año anterior, y sumando enero, el primer bimestre del 2023 cerró con una merma aproximada del 30%.