El mercado interno de vinos muestra señales de recuperación en 2025, tras un cierre complicado el año anterior. Las ventas crecieron un 7,9% en abril y acumulan una suba del 6,5% en el primer cuatrimestre.

El sector vitivinícola argentino comienza 2025 con buenas noticias: las ventas de vino en el mercado interno experimentaron una mejora sostenida durante los primeros cuatro meses del año, según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV). La recuperación llega después de un último trimestre de 2024 marcado por la caída del consumo.

En abril de 2025, las ventas de vino alcanzaron los 58.475.600 litros, lo que representa un aumento del 7,9% respecto al mismo mes del año anterior. El incremento equivale a 13.628.600 litros adicionales en el mercado.

La tendencia alcista se mantuvo en el acumulado del primer cuatrimestre: de enero a abril se vendieron 222.662.400 litros, un 6,5% más que en el mismo período de 2024. El dato cobra especial relevancia tras la fuerte baja registrada en diciembre pasado, que había afectado los promedios interanuales.

El crecimiento mensual fue progresivo: enero marcó una suba del 10%, febrero del 6% y marzo del 1,9%, lo que consolida un escenario de recuperación estable para la industria.

En cuanto a los formatos preferidos por los consumidores, las botellas se mantienen al frente con el 62% del mercado, abarcando todos los tamaños. Le siguen los envases tipo Tetra Brik con el 34,8%, las damajuanas con el 2,7%, y en menor medida, opciones como latas y bag-in-box.

El impulso general estuvo liderado por un aumento del 11,7% en las ventas de botellas, mientras que otros formatos mostraron retrocesos, en especial las latas, que registraron una caída cercana al 10%.

Con estos datos, el mercado doméstico del vino da señales claras de dinamismo, un factor clave para sostener el ecosistema vitivinícola argentino y su entramado productivo.