Nuevamente las distorsiones del mercado generan rispideces entre las bodegas, que buscan abaratar sus costos de producción, y los productores de la uva, que denuncian ofertas por debajo del costo de producción. El precio mínimo, en dólares, que fijaron para cada uva.
Mientras el Instituto Nacional de Vitivinicultura lanzó finalmente su estimación de cosecha, la que permite dar más certidumbre sobre operaciones de compraventa, las bodegas comienzan a negociar con viñateros y el resultado de esas negociaciones ya comienza a generar rispidez.
Este martes, distintas cámaras que nuclean a viñateros de San Juan y Mendoza se reunieron con el objetivo de advertir por el riesgo que implica para los productores la oferta económica que están implementando las bodegas para comprarles las uvas, la que, según ellos, está por debajo de los costos de producción.
En este sentido, hubo una reunión con el objetivo de establecer precios mínimos de referencia que sirven como guía para los productores a la hora de vender la cosecha, y que a la vez permite mantener -en caso de que se cumplan- márgenes mínimos de ganancia que permitan proteger a los viñateros.
Tal como ocurre cada año, la Asociación Viñateros de Mendoza, en conjunto con otras cámaras de Mendoza y de San Juan, esbozaron los valores sugeridos de venta de las uvas para vinos.https://t.co/GlPyjodENQ
— viñaterosdemendoza (@avm_mendoza) January 30, 2024
La particularidad es que estos valores de referencia fueron emitidos en dólares, con una cotización de referencia en el valor del dólar oficial, a la venta, en el Banco Nación.
Los precios que los viñateros establecieron por kilogramo, que se ajustan al día de la Asamblea -martes 30 de enero- están sujetos a modificación en caso de que se produzcan cambios en materia cambiaria o incrementen los costos de producción. Quedaron fijados de la siguiente manera:
Criollas o mezcla de criollas: USD 0.37.
Blancas A: USD 0.75
Blancas B: USD 0.50
Tintas A: USD 0.70
Tintas B: USD 0.50
Mientras tanto, distintas agrupaciones que nuclean al sector lanzaron un comunicado muy duro contra los otros eslabones de la cadena de la industria, como son las bodegas y el sector público, para exigir que se proteja a los trabajadores vitivinícolas pagando un precio justo por la uva.
“Con mucha seriedad y compromiso por defender la cultura del trabajo en la producción de uvas y bregando siempre por la sostenibilidad del productor vitivinícola en todo el país y basándonos en los costo de producción establecidos por el INTA Estación Experimental Junín y las distintas entidades participantes es que solicitamos que al productor se le pague un precio acorde con sus costos de producción (costos totales / kilogramos por hectárea) y pugnando para que toda la cadena vitivinícola sea sostenible”, señalaron.
El comunicado fue firmado por la Asociación de Productores del Oasis Este de Mendoza, la Asociación de viñateros de Mendoza, la Mesa vitícola de San Juan, la Asociación de Viñateros Independientes de San Juan, la Federación de Viñateros de San Juan y la Mesa de Enlace de productores agrícolas de Mendoza.
En su comunicado, advirtieron: “No podemos seguir vendiendo por debajo de nuestros costos. Las bodegas deben entender que si seguimos este camino nos quedaremos sin productores, con todos los perjuicios sociales, económicos y habitacionales que ello provocaría para toda la sociedad”,
Finalmente, solicitaron la intervención de los distintos estratos del Gobierno -provinciales y de organismos nacionales- a “realizar todos los esfuerzos necesarios a fines que toda la industria pueda fijar una revisión de los costos de la misma y trabajar en una digna y equitativa distribución”.
