Con algunas definiciones por delante que puede abaratar más una tasa de interés inicial del 25%, los pequeños productores vitivinícolas de Mendoza tendrán financiamiento para la cosecha 2022.

Se trata de una línea de $2.000 millones en total que el Ejecutivo provincial lanzó, en parte con fondos del Banco Nación y del Fondo de Transformación y Crecimiento (FTyC), para solventar desde $450 por quintal de uva a recolectar.

Según los cálculos oficiales, el FTyC aporta $500 millones y el banco, actual agente financiero provincial, otros $1.500 millones para asistir a unos 2.500 productores, y más de 600 bodegas elaboradoras en la próxima temporada. Así lo había confirmado a inicios de noviembre el propio titular de la entidad, Eduardo Hecker, en respuesta al pedido dl ministro de Economía Enrique Vaquié.

Un 60% del dinero disponible está destinado a los viñateros cooperativizados, mientras que los $600 millones restantes irán a los que trabajan por su cuenta.

«Como todos los años lanzamos la operatoria para financiar cosecha y acarreo. La Provincia acompaña estos créditos del banco con un subsidio de tasa de 7 puntos, y el Fondo por su parte implementa otra línea por $500 millones. Le solicitamos al Gobierno nacional que nos acompañe en la bonificación del interés para poder llegar con tasas más accesibles tanto a productores como elaboradores», precisó la nueva presidente del FTyC, Laura Torres.

Condiciones y montos: qué precios se proyectan para 2022

Tal como en la temporada anterior, el financiamiento a instrumentar a partir de enero próximo está pensado para productores de hasta 20 hectáreas y bodegas. Y los montos varían según el tipo de uva y el destino, aunque está claro el impacto de la inflación interanual.

Así, para la genérica o no varietal se financiará $ 450 por quintal del gasto de cosecha y acarreo, y para la uva varietal $525 por quintal, lo que representa un aumento del 50% en relación a lo otorgado para la cosecha 2021 (entre $300 y $350 respectivamente). En cambio, para elaborar (mosto o vino) el préstamo pasa de los $150 por quintal otorgados este año a $ 225 por quintal a procesar, en cualquier caso a devolver hasta en 1año sin período de gracia una vez iniciado el ciclo comercial.

Para avanzar con la «despapelización», el Fondo habilitó por primera vez la gestión de los créditos a través de la web en forma directa, con las garantías habituales, es decir, hipoteca, prenda (sobre automotores) o aval otorgado por una SGR (Sociedad de Garantía Recíproca). También habilita un fideicomiso en el que el solicitante podrá depositar vino o mosto por el valor equivalente.

A propósito, las cotizaciones proyectadas para ese fideicomiso anticipan cómo se perfila el mercado para el 2022. De hecho, el siempre valorado Malbec se toma a $ 80 por litro entre otros varietales, contra los $50 de comienzos del 2021. ¿Qué pasa con los otros productos? Mientras el tinto genérico llega a $50, los blancos quedan un poco más abajo ($39 por litro), y el mosto sulfitado marca el piso ($35), que fue de $25 este año.

 Bonificación extra pendiente

Pero un tema no menor es, en tiempos en que poder contar con créditos se hace muy difícil, poder conseguir que sean lo más «blandos» posible.

Por eso, tras asegurarse los recursos por parte del banco que es agente financiero de Mendoza, el 9 de noviembre Vaquié le había solicitado al secretario de Pymes de la Nación, Guillermo Merediz, aportar 5 puntos adicionales de bonificación total para alcanzar 21%, la misma de este año. Esto, a través del FONDEP (Fondo Nacional de Desarrollo Productivo), a través del cual hace algunos meses también se había facilitado la capitalización de Impsa.

Según el subsecretario de Agricultura, Sergio Moralejo, «todo hace prever que en este contexto seguirán inestables, porque el hecho de manejar tasas negativas frente a la inflación genera mucha incertidumbre. Por eso le pedimos al banco que mantenga tasa fija, y por otro lado a la Nación que colabore con 5 puntos, porque la bonificación es un esfuerzo de todos los mendocinos para bajar el interés que resulta en una transferencia de recursos de la Provincia a la Nación».

Si bien aún no hay respuesta desde Buenos Aires al respecto, en el seno del ministerio asumen que esa baja de la tasa estaría asegurada de uno u otro modo, con lo cual el costo final de los préstamos llegará al 21%. «Pretendemos es que sea lo suficientemente negativa para que el productor, el eslabón más débil de la cadena, no vea una caída del precio de la uva. Por eso, frente a una expectativa inflacionaria del 52%, ofrecer una tasa del 20 no debería afectar la rentabilidad», añadió el funcionario.

De hecho, el plazo para confirmarlo es la segunda quincena de enero. Es que en febrero deberían empezar los desembolsos para la cosecha de uvas blancas, las primeras de la temporada.

FUENTE: SITIOANDINO.COM.AR