Mientras el pacto puede beneficiar las exportaciones de aceite de oliva y vino desde Europa a Sudamérica, genera preocupación en sectores como el hortofrutícola y ganadero por el impacto de las importaciones.
El acuerdo comercial entre la Unión Europea y Mercosur, firmado en 2019 pero aún pendiente de ratificación, genera divisiones en el sector agroalimentario de Europa. Aunque se vislumbran beneficios para productos como el aceite de oliva y el vino, otros sectores, como el hortofrutícola y el ganadero, expresan su rechazo por el posible impacto de las importaciones.
España principalmente, respalda la ratificación del pacto, pero enfrenta la oposición de países europeos como Francia, que exigen mayores garantías ambientales y agrícolas a los países sudamericanos. El acuerdo busca liberalizar el 99% del comercio agrícola entre ambas regiones, aunque las negociaciones de un anexo adicional sobre deforestación y agricultura continúan sin avances concretos.
Impacto en las exportaciones españolas
En 2023, las exportaciones agroalimentarias españolas hacia Mercosur aumentaron un 5,4%, alcanzando los 420 millones de euros, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Entre los principales productos enviados se destacan el aceite de oliva, el vino, el mosto y las frutas de hueso. Por otro lado, las importaciones, lideradas por habas, tortas de soja y maíz, disminuyeron un 29,4%.
A pesar de este crecimiento, el déficit comercial alcanzó los 3.674 millones de euros, un aumento del 32% en comparación con el año anterior.
Sectores clave ante el acuerdo
- Aceite de oliva : Rafael Pico, director de la asociación exportadora Asoliva, considera el acuerdo «atractivo» por la reducción de aranceles, especialmente en Brasil, el mayor importador sudamericano de aceite de oliva. Sin embargo, advierte sobre la competencia que podrían representar países como Argentina, Chile y Perú.
- Vino : La Federación Española del Vino (FEV) ve con optimismo el pacto, ya que facilitaría el comercio al eliminar gradualmente aranceles, proteger denominaciones de origen y establecer normas claras para el sector.
- Hortalizas y frutas : La Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex) expresa preocupación sobre el impacto negativo del acuerdo debido a la falta de análisis detallados y las dificultades fitosanitarias para acceder al mercado de Mercosur. Entre enero y agosto de 2023, España exportó frutas y hortalizas al bloque por 39 millones de euros, mientras que las importaciones alcanzaron los 149 millones.
- Piensos : Jorge de Saja, de Cesfac, señala que el acceso a materias primas esenciales para la alimentación animal es crucial para mantener la competitividad, aunque reconoce que el acuerdo no es «perfecto».
- Ganadería : Matilde Moro, gerente de Asoprovac, advierte que el pacto podría agravar la situación del sector bovino europeo, afectado por normativas menos estrictas en Mercosur. Además, critica la «hipocresía» de la UE en temas como la deforestación y el bienestar animal.
Un acuerdo sobre la cuerda floja
El pacto UE-Mercosur se presenta como una oportunidad para diversificar mercados y fortalecer el comercio entre los bloques, pero también como una amenaza para sectores sensibles de la economía europea. Con varios países europeos pidiendo mayores garantías, la firma del acuerdo sigue siendo incierta, mientras España busca un equilibrio entre las oportunidades y los riesgos que este representa para su sector agroalimentario.
FUENTE: FEDERACION ARGENTINA DEL CITRUS
