El estudio «Hacia un sector agroalimentario más competitivo, inclusivo y resiliente» analiza las causas del estancamiento y propone soluciones para la recuperación.
Argentina, reconocido como el tercer exportador mundial de alimentos, cuenta con un sector agrícola que representa el 15,7% del producto bruto interno (PBI) y el 10,6% de los ingresos tributarios de 2021. Sin embargo, en los últimos años, la participación de Argentina en los mercados internacionales ha disminuido, generando preocupación sobre la competitividad del sector.
El reciente informe del Banco Mundial, titulado «Reimaginando el sector agropecuario argentino», aborda esta problemática y explora las oportunidades de crecimiento del sector, destacando las dificultades actuales.
Este informe se basa en un estudio previo y más detallado denominado «Hacia un sector agroalimentario más competitivo, inclusivo y resiliente», elaborado por Irene Wasilevsky, especialista en agricultura del Banco Mundial.
El documento señala que Argentina es el único país líder en el sector agroexportador cuyos envíos han disminuido. Durante la última década, estas exportaciones cayeron un 1,3% anual y la participación en los mercados internacionales descendió un 0,5%.
El Banco Mundial advierte que el sector agroalimentario argentino ha sufrido un estancamiento en los últimos diez años, a diferencia de sus competidores en la región que han continuado creciendo.
«Existen políticas generales y específicas que generan distorsiones y cambios de situación. A nivel impositivo, se destacan la carga tributaria sobre las exportaciones, los impuestos a los ingresos brutos y las barreras para exportar e importar, que crean distorsiones en el sector y desincentivan la inversión y los rendimientos. Aunque el sector sigue produciendo, las desventajas competitivas le ponen trabas», evaluaron.
El informe también alerta sobre los posibles impactos de los desastres climáticos en la producción. «Si no se implementan medidas de adaptación, los daños causados por las inundaciones podrían reducir el PIB en un 0,5% anual para 2060, y las sequías persistentes podrían provocar una disminución del PIB de un 4% anual para 2050».
A pesar de estos desafíos, el informe sugiere que Argentina puede superar el estancamiento fomentando la competitividad agroalimentaria y los rendimientos económicos, la inclusión socioeconómica y la resiliencia y sostenibilidad ambiental.
Para impulsar la recuperación y promover la sustentabilidad, el Banco Mundial recomienda apoyar a los productores familiares, desarrollar un marco regulatorio estable para el sector, mejorar la resiliencia y acelerar la innovación tecnológica.
1 Comentario
Son muy altos los impuestos (retenciones y demás) que tiene que pagar el productor. No es gratis subir y mantener impuestos.