Ricas en nutrientes y antioxidantes, las pasas de uva mejoran la digestión, benefician el corazón y contribuyen a la salud bucal, aunque deben consumirse con moderación.
Las pasas de uva, originarias de Oriente Medio, han sido parte de la dieta humana por siglos y fueron adoptadas en Europa por griegos y romanos, quienes las utilizaban como alimento, moneda, y remedio casero. Hoy en día, esta fruta seca se encuentra en numerosos platos dulces y salados, destacándose por su sabor y beneficios nutricionales.
¿Por qué son beneficiosas para la salud?
Las pasas contienen fibra soluble y ácido tartárico, que favorecen la digestión al regular el movimiento intestinal y reducir la inflamación, según un estudio de expertos españoles y chilenos publicado en Nutrients. Estos componentes promueven un balance saludable en la flora intestinal.
El consumo de pasas también beneficia al sistema cardiovascular. Su alto contenido de antioxidantes y potasio ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL y a mantener la presión arterial en niveles óptimos, disminuyendo así el riesgo de enfermedades cardíacas.
Otro aspecto destacado es su impacto positivo en la salud bucal. Las pasas contienen ácido oleanólico y linoleico, compuestos antibacterianos que inhiben el crecimiento de bacterias causantes de la placa dental y ayudan a mantener un pH bucal equilibrado, reduciendo la probabilidad de caries.
Además, debido a su alto contenido de fibra, las pasas ayudan a controlar el peso, ya que generan una sensación de saciedad que evita el consumo excesivo de alimentos. Según WebMD, pueden ser una alternativa saludable a los bocadillos menos nutritivos.
Por último, las pasas son ricas en hierro, esencial para la producción de hemoglobina, ayudando a prevenir la anemia y mantener niveles de energía adecuados, tal como se detalla en Nutrients.
¿Cuál es la cantidad recomendada?
Aunque las pasas aportan múltiples beneficios, su alto contenido en azúcares y calorías hace necesario un consumo moderado. Los especialistas sugieren una porción diaria de entre 80 y 90 gramos (aproximadamente media taza) para obtener sus ventajas sin consumir demasiada azúcar.
Es importante recordar que quienes padecen diabetes deben consultar con un profesional de la salud antes de incluirlas en su dieta, ya que, a pesar de tener un bajo índice glucémico, contienen una cantidad considerable de azúcar.
FUENTE: TODOJUJUY.COM