Los controles apuntan a que se haga una regularización de estos destiladores, para lo cual se hará una inscripción de los mismos. El INV tiene como competencia controlar la genuinidad de los alcoholes.
Por todos lados se conoce la aparición de productores elaboradores de GIN, bebida para la cual se tiene que trabajar con alcoholes destilados. Esto lleva a que desde distintos puntos del mercado se ofrezcan destiladores artesanales que estos emprendedores utilizan para sus productos.
Ante esto, el INV- Instituto Nacional de Vitivinicultura- sacó la resolución 21/2023, que establece definiciones y reglas mínimas para los establecimientos que utilizan alcohol, porque hay elaboradores artesanales que no siempre cumplen con todas las normas vigente.
Zonda Diario habló con Alejandro Rodrigo, titular de la delegación San Juan, del Instituto Nacional de Vitivinicultura, quien expresó que «se trata de una resolución que salió publicada hace una semana en el Boletín Oficial, que habla sobre identificar e inscribir a esta gente que está trabajando con alcoholes». Es por esto que la idea del INV cuando surgió la necesidad de la resolución era sumarlos en una resolución y formalizarlos.
El funcionario explicó que «esta resolución es mas simple que inscribirse como un destilador pero se encontraría en el mismo ámbito que cuando se hizo la resolución para los elaboradores de vinos artesanales». Vale marcar que la presente resolución fue trabajada desde la Delegación San Juan del INV y luego elevada a nivel nacional.
Cuando profundiza sobre el tema cuenta que «vimos mucha manipulación de alcohol de gente que está haciendo gin, por lo que se buscó nuclearlos e invitarlos a que se inscriban en el INV».
La medida surge a partir de la necesidad de hacer controles para que se utilicen alcoholes genuinos que no hagan daño al consumo humano. «En la resolución está estipulado cuales son los alcoholes que pueden utilizarse. Es por ello que a partir de la resolución los elaboradores tendrán normado cuáles son los alcoholes que pueden utilizar en sus productos artesanales».
Agrega que «hace un tiempo que está en auge este tipo de destilaciones y hay empresas nacionales que ya venden destiladores. Por esto para el INV ha sido darle un ordenamiento y que los elaboradores tengan algún tipo de responsabilidad», en el caso de que haya un uso indebido de este tipo de alcoholes».
Por último, una vez que se tenga el registro de elaboradores, estarán sujetos a controles del INV, sobre cómo están trabajando con cada producto».
Una adulteración que mató
Hablando sobre la calidad del tipo de productos que se pone en el mercado, la utilización de alcoholes que no corresponde pueden llegar a matar personas y esto es gran parte de la preocupación por parte del INV con los elaboradores artesanales de Gin.
En San Juan, hace 30 años, se produjo la muerte de 29 personas que habían tomado vinos adulterados en la Bodega de Torraga, en la provincia de San Juan.
El caso tuvo una implicancia directa en la caída del consumo de vinos y entre otras cosas se considera que fue el fin de la damajuana, embase predominante cuanto ocurre lo del bodeguero Mario Torraga.
FUENTE: DIARIOELZONDASJ.COM.AR